Depende del tipo de obra que hayas realizado, pero suele ser habitual que siempre queden restos de cemento o pegamento de azulejos en el suelo o en las paredes, y para retirarlos sin dañar el material, vas a necesitar destreza, delicadeza y productos específicos de limpieza.
Lo mismo ocurre con la pintura. Pintar las paredes y/o los techos suele ser lo último que se hace, y por mucho cuidado que se tenga, siempre hay salpicaduras que se quedan incrustadas en las ventanas, cristales, suelos y paredes. O restos de las llagas que se dan en los azulejos, la lechada… Para quitarlos también conviene tener mucho cuidado y hacerlo de manera suave.
Por lo general hace falta fregar varias veces, con varios cambios de agua y con limpiadores especiales que hacen que la suciedad de la obra se retire mucho más fácilmente. Incluso, en la mayoría de los casos se requiere maquinaria especial de limpieza para quitar los restos de obra.
Si contratas una empresa especializada como la nuestra, te ahorrarás todo ese tiempo y esfuerzo.
Contamos con todo lo necesario para dejar cualquier superficie limpia y brillante, en el menor tiempo posible y con total garantía. Desinfectar y dejar el espacio impoluto es clave para que disfrutes al máximo del resultado de la obra.
En Vidal Limpiezas somos especialistas en la limpieza de obras en León; si necesitas un servicio muy profesional como el nuestro, contacta con nosotros y te ayudaremos.